Los lápices de Raúl, como su mirada, nos transmiten sinceridad, paz, amor y una profunda emoción y es desde ahí, desde donde os desea y os deseamos los que estamos en torno a La Cabeza del Rinoceronte, un año 2014 en el que la Dignidad de las Personas y los Derechos Humanos sean una meta alcanzable y lo de todos siga siendo de todos, es decir PÚBLICO.
“Todo parece imposible hasta que se hace” N.Mandela